¿Cómo aportar valor digital a las comunidades vulnerables desde nuestro rol como comunicadores?

Los niños y adolescentes  principalmente del interior del país y de familias de escasos recursos, son una de las comunidades más vulnerables en Guatemala. Muchos de ellos quedan fuera del sistema educativo y sus derechos básicos no son respetados. Por ende, tienen acceso a muy poca o nula información en el ámbito de educación sexual. Lo que desencadena un sinfín de problemas sociales, relaciones insanas y abusos que vulneran la salud física y mental de ellos.  

La educación sexual es de suma importancia en la formación de una persona, ya que le permite aprender a poner límites, conocer sus derechos y cuidar de sí mismo/a. Además, ayuda a prevenir casos de violencia sexual, identificar señales negativas y tomar decisiones informadas. No obstante, Guatemala es un país en donde la educación sexual está lejos de ser una de las prioridades de los gobernantes. 

 

En estos casos las herramientas tecnológicas y digitales nos brindan oportunidades para llenar dichos vacíos de información y contribuir con los más vulnerables. A partir de nuestro rol como comunicadores podemos aportar valor digital que genere un cambio, que es parte fundamental dentro de nuestra profesión.

 

Concretamente, podemos crear campañas de educación sexual para que la información sea más accesible, comprensible y llamativa para el público objetivo, que en este caso son los niños/as y adolecentes. Se pueden crear materiales audiovisuales, audios, imágenes y material didáctico que eduque en temas de consentimiento, hábitos saludables, la sexualidad humana, la propia identidad, el respeto, métodos anticonceptivos, entre otros. 

 

Las redes sociales serían nuestras grandes aliadas. Puesto que, se pueden crear perfiles en las distintas plataformas, en donde el contenido se encuentre disponible. Para así, crear un espacio seguro en donde los niños (acompañados de sus padres) y los adolescentes puedan informarse, al mismo tiempo que resolver sus dudas a través de expertos en el tema. 

 

En la actualidad el acceso a redes sociales como Facebook, WhatsApp, Youtube Instagram y Tiktok es común en los adolescentes, aproximadamente desde los 13 años o antes (aunque no suele ser recomendado por expertos). Además, a lo largo de los años los costos de teléfonos inteligentes e internet han disminuido por su expansión y variedad en el mercado. Gracias a ello, cada vez más personas pueden poseer un dispositivo con el cual conectarse a redes sociales e internet. Algo que debe aprovecharse para crear contenido de valor que contribuya de forma positiva en la vida de las personas.

 

Por otro lado, además de la creación de perfiles en redes sociales, también se puede crear una plataforma de educación sexual en internet para todas las edades. En donde de igual manera se publique constantemente contenido que sea llamativo y de fácil comprensión. De dicha forma, las personas pueden encontrar medios en donde informarse para cuidar de su sexualidad sanamente. Así como, prevenir enfermedades, abusos por parte de otras personas que vulneren su bienestar integral, etc.

 

El mundo digital nos brinda gran variedad de herramientas y como comunicadores la posibilidad de influir positivamente en la vida de muchas personas. Incluso, de llegar a cambiarla y transformarla. Es importante que desde nuestro rol tengamos una visión consciente de la realidad en la que vivimos y de la gran oportunidad que poseemos para crear un impacto en los demás. Esto pues, contamos con la posibilidad de transmitir información constructiva a aquellos más vulnerables que merecen ser informados.

 

Aportar valor digital a las comunidades más vulnerables, como en este caso son los niños y adolescentes, es necesario y urgente en temas como educación sexual. Las herramientas se encuentran a nuestro alcance, lo necesario es actuar y comprometernos con los otros.